Amor sin Tiempo
Amor que viajas por el tiempo
para hacerme compañía
Que puedes estar sin estar.
Porque tu presencia se quedo tan dentro mío.
Que incluso hoy que ya no tengo la gracia de tenerte
puedo sentirte junto a mí.
Seguiré adelante como te lo prometí
Cumpliré mis sueños
y los viviré sin ningún remordimiento.
Seré yo.
No temeré a nada.
Más no te olvidare.
Contigo descubrí como dos personas pueden ser uno
no por ser iguales sino por ser diferentes.
Por complementar el vació en cada uno.
Nuestra fallas.
Tu remediaste mis errores.
Los hiciste tuyos.
Me enseñaste tantas cosas difíciles de explicar.
Momentos que jamás olvidare,
que siempre fueron soñados
pero que contigo se hicieron realidad
Perfecto fuiste tú que estuviste
hasta lo último conmigo.
Demostrándome en cada minuto de esta vida,
el significado de la misma.
Tú fuiste compasión, ternura, paz.
Tú eres mi amor sin tiempo.
Porque nadie te borrara de mí.
Porque a pesar de los años te sigo queriendo
de esta forma tan loca.
Porque no te puedo olvidar.
Porque nos volveremos a ver.
Tal vez no ahora pero si en otro tiempo,
en otra realidad... en un nuevo espacio.
¿No lo crees?
Un presentimiento tengo dentro.
El mismo que sentí el día en que te conocí.
Lo recuerdas, aquella ciudad... aquel atardecer:
—Te conozco... —pronuncie temerosa. Mientras tus manos ágiles me ayudaban a levantarme del suelo. Mi corazón vagaba sin comprender las emociones nuevas que poseía.
Sé quién eres tú pero ¿cómo? ¿Si nunca te he visto?
Mi memoria intenta revivir algo oculto olvidado por el tiempo.Un sentimiento volvió a florecer.
—Tal vez— respondes tú—vengo de un lugar sin tiempo—Ríes con ternura y coges mis libros del suelo.
Aquella tarde me robaste el corazón y mi alma fue tuya.
Mi querido amor... mi eterno amor sin tiempo.
No tengo miedo de la muerte... no tengo miedo de las personas.
No me asustan las guerras, ni la crueldad.
No temo quedarme sola en mi oscuridad.
Tengo miedo de haberte perdido para siempre.
Me aterra pensar que jamás volveré a escucharte reír,
Ni a reflejarme en tus ojos dorados.
Aquellos espejos sagrados,
lo cuales podían ver más allá
y comprenderme perfectamente.
No me importa dónde o cuando
solo quiero volverte a ver.
Te aguardo... te sueño.
Nos volveremos a ver.
¿Verdad?
El viento silba a mi lado.
Un susurro acertado me deja...
Tal vez...
Amor que viajas por el tiempo
para hacerme compañía
Que puedes estar sin estar.
Porque tu presencia se quedo tan dentro mío.
Que incluso hoy que ya no tengo la gracia de tenerte
puedo sentirte junto a mí.
Seguiré adelante como te lo prometí
Cumpliré mis sueños
y los viviré sin ningún remordimiento.
Seré yo.
No temeré a nada.
Más no te olvidare.
Contigo descubrí como dos personas pueden ser uno
no por ser iguales sino por ser diferentes.
Por complementar el vació en cada uno.
Nuestra fallas.
Tu remediaste mis errores.
Los hiciste tuyos.
Me enseñaste tantas cosas difíciles de explicar.
Momentos que jamás olvidare,
que siempre fueron soñados
pero que contigo se hicieron realidad
Perfecto fuiste tú que estuviste
hasta lo último conmigo.
Demostrándome en cada minuto de esta vida,
el significado de la misma.
Tú fuiste compasión, ternura, paz.
Tú eres mi amor sin tiempo.
Porque nadie te borrara de mí.
Porque a pesar de los años te sigo queriendo
de esta forma tan loca.
Porque no te puedo olvidar.
Porque nos volveremos a ver.
Tal vez no ahora pero si en otro tiempo,
en otra realidad... en un nuevo espacio.
¿No lo crees?
Un presentimiento tengo dentro.
El mismo que sentí el día en que te conocí.
Lo recuerdas, aquella ciudad... aquel atardecer:
—Te conozco... —pronuncie temerosa. Mientras tus manos ágiles me ayudaban a levantarme del suelo. Mi corazón vagaba sin comprender las emociones nuevas que poseía.
Sé quién eres tú pero ¿cómo? ¿Si nunca te he visto?
Mi memoria intenta revivir algo oculto olvidado por el tiempo.Un sentimiento volvió a florecer.
—Tal vez— respondes tú—vengo de un lugar sin tiempo—Ríes con ternura y coges mis libros del suelo.
Aquella tarde me robaste el corazón y mi alma fue tuya.
Mi querido amor... mi eterno amor sin tiempo.
No tengo miedo de la muerte... no tengo miedo de las personas.
No me asustan las guerras, ni la crueldad.
No temo quedarme sola en mi oscuridad.
Tengo miedo de haberte perdido para siempre.
Me aterra pensar que jamás volveré a escucharte reír,
Ni a reflejarme en tus ojos dorados.
Aquellos espejos sagrados,
lo cuales podían ver más allá
y comprenderme perfectamente.
No me importa dónde o cuando
solo quiero volverte a ver.
Te aguardo... te sueño.
Nos volveremos a ver.
¿Verdad?
El viento silba a mi lado.
Un susurro acertado me deja...
Tal vez...
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